Azulejo recordatorio de los hechos
Otros conversos se plantean hacer frente a los inquisidores e intimidarles con la intención de forzarles a abandonar la ciudad. En este sentido, un pequeño grupo prepara una manifestación popular, pero el complot es descubierto por la indiscreción y los comentarios de la hija principal del cabecilla, Susana, llamada la Hermosa Hembra. Los conjurados, que son inmediatamente detenidos y condenados a muerte, figuran entre las primeras víctimas de la Inquisición Española.
Breve historia de la Inquisición Española, Joseph Pérez, p.31
Los pájaros sin patas 